¿Cómo puede mi empresa ser mucho más rentable?

Cuando trabajamos en un proyecto es importante contabilizar todas las horas y diferenciar, cuidadosamente, aquellas que debemos facturar al cliente de las que no. ¿Por qué es esto importante?

La explicación es sencilla: esta operación nos va a permitir conocer cómo somos de eficientes a la hora de convertir nuestra capacidad en beneficio para la empresa. De esta forma podremos conocer la rentabilidad de nuestra empresa, un dato realmente importante.

Siendo realistas, a día de hoy muchas empresas no conocen cuál es su rentabilidad, bien debido a que no disponen de la información adecuada o de las herramientas necesarias para obtenerla. Si no sabes en qué punto te encuentras en términos de rentabilidad es prácticamente imposible que sepas cómo debes crecer.

Muchas empresas tienden a continuar por el camino que les ha funcionado durante años y no quieren invertir en nuevas tecnologías, bien por desconocimiento de los beneficios que podrían aportar o bien por razones económicas al no ser capaces de medir el rendimiento que tienen y cómo podrían incrementarlo.

Si los costes operacionales de las empresas son altos, tenderán a buscar la rentabilidad a través de horas facturables de sus empleados. Por desgracia, aunque en teoría pueda parecer algo razonable, en la práctica suele ser muy complicado y si no contamos con sistemas de medición y análisis precisos, no suele funcionar.

Tener información precisa sobre los proyectos y procesos de nuestra empresa es esencial si queremos conocer los posibles problemas que podrían derivar en una baja rentabilidad.

Esta información nos permitirá descubrir algunas causas relativamente sencillas de corregir; esto nos llevará a incorporar pequeñas mejoras a nuestro día a día que se traducirán, indudablemente, en un beneficio en la facturación mensual. Sin este conocimiento, quizá ciertos problemas -por muy simples que sean- seguirán dificultando el que podamos conseguir una gran rentabilidad.

No podemos almacenar las horas como si de un producto cualquiera se tratase. Una vez que se han perdido, no se podrán recuperar. El tiempo que un consultor invierte esperando a que le llegue un buen proyecto es tiempo que no podremos recuperar ni facturar.

Un análisis continuo de las capacidades y de los tiempos es vital para cualquier empresa de cara a diseñar planes de capacidad y trabajo eficientes.

El objetivo es poder disponer de análisis en tiempo real para conocer quién está haciendo qué y si este trabajo se está realizando de la forma más eficiente. Cuando asignamos tareas a los trabajadores de forma eficiente los proyectos se desarrollan de forma más veloz y su facturación es por tanto más positiva.

Analizar nuestro proceso de trabajo es esencial para mejorar el margen de beneficio. Aunque invertir tiempo en tareas no facturables podría parecer un paso atrás en esta industria, si no analizamos todo lo que hay detrás no seremos capaces de detectar oportunidades para ser más productivos y seguir creciendo.