Smart Working: la nueva evolución del Teletrabajo

El concepto del trabajo ha cambiado por completo en los últimos años, más si cabe a raíz de la pandemia, y en el entorno laboral empiezan a surgir nuevos términos como el Smart Working. Y es que, la llegada de nuevas herramientas tecnológicas y el valor que han adquirido los empleados y su bienestar, están transformando por completo el panorama de muchas empresas. Sin embargo, y pese a que el teletrabajo ha sido uno de los grandes protagonistas del 2020, parece quedar obsoleto con la llegada del Smart Working. 

En este sentido, las organizaciones deben ser capaces de adaptarse a los cambios que se están dando, tanto en la forma de trabajar como en la manera de entender el propio trabajo. Solo así conseguirán mantener la satisfacción y la motivación de la plantilla, y por ende, su eficacia y productividad. Y para ello, implementar nuevos métodos y sistemas que faciliten la vida de los empleados, como por ejemplo el Smart Working a través de un software de RRHH, serán garantía de éxito y compromiso en la gestión de los recursos humanos.  

A continuación se explica en detalle el significado de Smart Working, los factores que contempla y cómo está siendo su aplicación en las empresas españolas.

Se entiende por Smart Working el vínculo entre el teletrabajo y las nuevas tecnologías. Es decir, se trata de la metodología que ofrece a los empleados el acceso a todas las herramientas necesarias con el objetivo de garantizar su autonomía y su máximo nivel de productividad laboral, trabajen donde trabajen. 

Y aunque las diferencias entre teletrabajo y Smart Working puedan parecer mínimas, lo cierto es que el teletrabajo forma parte del Smart Working, un modelo de trabajo que va mucho más allá. Mientras que el teletrabajo solamente contempla el desempeño de las tareas de manera remota, el Smart Working hace referencia a los objetivos que cada empleado debe cumplir para calificar su trabajo como productivo. 

En este sentido, podría decirse que el Smart Working es la evolución del teletrabajo ante un panorama en el que, las horas delante del ordenador cobran, cada vez, menos importancia frente al valor que se le da al trabajo efectivo en base a los objetivos predeterminados para cada trabajador. Y para garantizar la eficacia del Smart Working, hay que tener en cuenta que debe existir una gran confianza entre la empresa y el personal, además de una coordinación y comunicación excelentes que permitan a la plantilla mantenerse informada acerca de los objetivos a alcanzar en todo momento. 

Así, el Smart Working se basa en una serie de factores que lo caracterizan: 

• Trabajar por objetivos: tal y como se ha mencionado, este modelo se basa en la consecución de objetivos concretos por cada empleado.  
• El trabajo telemático y la movilidad: cada trabajador tiene la autonomía de decidir dónde quiere trabajar.
• La flexibilidad: los empleados, además de elegir el lugar desde el que desean trabajar, también cuentan con una mayor flexibilidad horaria que permite conciliar la vida laboral con la familiar sin que esto suponga ningún obstáculo.
• Las nuevas tecnologías: es uno de los factores clave, ya que es la garantía de la efectividad del trabajo en remoto, por lo que también contempla la transformación digital de las compañías, como a través de la implementación de un software para automatización de los procesos empresariales, entre otros.

Aunque el Smart Working parece ser la metodología de trabajo óptima, pensada para el bienestar de los trabajadores y de la empresa, lo cierto es que nuestro país parece estar lejos de su incorporación. Y es que, según los datos recogidos por el Indicador de Confianza Empresarial (ICE) elaborado por el INE sobre el Impacto de la Covid-19 durante el segundo semestre del 2020 y el primero de 2021, solo el 37,6% de los trabajadores españoles teletrabaja, y el nivel de digitalización de las empresas tan solo ha alcanzado el 15,9%. 

Frente a este escenario, parece difícil implementar nuevos modelos de trabajo basados en características como el trabajo en remoto y las nuevas tecnologías. Sin embargo, las empresas que tengan la oportunidad de apostar por la evolución del trabajo, incluso por la evolución del teletrabajo al Smart Working, se convertirán automáticamente en empresas más competitivas y mejor preparadas para hacer frente a nuevos retos.

Por todo esto, las compañías que lo tengan a su alcance, deben adoptar las nuevas formas de trabajar y de entender el trabajo, sobre todo aquellas que pongan en el centro a los empleados y a su bienestar. Y para sumergirse en metodologías como el Smart Working, una de las mejores opciones para hacerlo es a través de las ventajas que ofrecen las nuevas tecnologías tales como los softwares de gestión empresarial.

En este sentido, las soluciones para la gestión de los recursos humanos de las empresas, son una de las herramientas que miran tanto a favor de los trabajadores como de la propia empresa. Este tipo de softwares contemplan todos los procesos de RRHH para una gestión integral desde cualquier lugar y en cualquier momento, como por ejemplo, la automatización de las ausencias, las bajas o las vacaciones; la gestión y el desarrollo del talento interno; los ciclos desde la publicación de un puesto vacante hasta haber completado de forma exitosa el proceso de onboarding, o la mejora de la experiencia de los empleados, entre otros. Es decir, son la solución para digitalizar el departamento de recursos humanos como una de las claves de la revolución tecnológica de la empresa.

En definitiva, la evolución del teletrabajo en España hacia nuevos modelos como el Smart Working, es uno de los principales retos a los que muchas empresas deben hacer frente. Y es que, solo a través de metodologías que aboguen por el bienestar de los empleados y la transformación digital, se consigue un mayor rendimiento, y por ende, será la única forma de garantizar el éxito y la eficacia de la organización.